Quienes somos

En Hacienda La Pava tradición, historia y sabor se dan la mano. Nuestra finca, ubicada en Utrera (Sevilla), cuenta con un legado que se remonta al siglo XVIII, con raíces en la agricultura, la ganadería y, según relatan documentos antiguos, incluso en la crianza de toros bravos.

A lo largo de generaciones, ha pertenecido a ilustres familias de la zona, pasando de viñedos a olivares, de cortijos a escenarios de importantes capítulos ganaderos. Fue adquirida por nuestros abuelos, D. Antonio Morales y Dña. María del Carmen Ojeda, quienes legaron no solo tierras, sino una historia viva, que hoy continuamos sus hijos con orgullo y dedicación.

En nuestras fincas colindaron en su día nombres emblemáticos como el Marqués de San Marcial y el Conde de Vistahermosa, vinculados a la crianza del caballo y el toro bravo, pilares fundamentales del patrimonio andaluz.

Y es en este enclave, con tanto arraigo, donde nace nuestro proyecto de catering y eventos. Una apuesta por la excelencia culinaria, el servicio cercano y una experiencia única en un entorno que respira historia.

Cada evento en Hacienda La Pava es una celebración del presente con raíces profundas en el pasado.

Orígenes de la Finca

La historia de Hacienda La Pava se escribe con raíces profundas en la tierra de Utrera. Esta finca, cuyos orígenes se remontan al siglo XIX, ha sido testigo del paso del tiempo, de familias ilustres y de generaciones dedicadas al campo, la ganadería y el cultivo de la vid.

Documentos antiguos nos revelan que perteneció a figuras como D. José Bascón de la Loma y su esposa Dña. Josefa Gonzalo y García, y más adelante, a su hija Ana Joaquina Bascón Gonzalo. En aquella época, la finca ya estaba sembrada de viñedos, reflejando la tradición agrícola de la zona.

Con el paso del tiempo, la propiedad fue adquirida por nuestros abuelos, D. Antonio Morales y Dña. María del Carmen Ojeda. Ellos consolidaron el legado familiar, transmitiéndolo a sus hijos. Hoy, Antonio e Isabel María Morales Sánchez somos los actuales propietarios, y con la memoria viva de nuestro padre, D. Juan Manuel Morales Ojeda “Mané”, continuamos con pasión la historia de esta tierra, ahora enfocada en crear momentos únicos a través de eventos inolvidables.

Cuna del Toro Bravo

La ubicación de la Hacienda no es casualidad. Estamos en un enclave privilegiado, rodeado históricamente por fincas donde floreció la ganadería brava. Según las antiguas notas simples y relatos orales, nuestras tierras colindaban con las del Conde de Vistahermosa, figura clave en el desarrollo del toro bravo tal y como hoy lo conocemos.

De hecho, fue en esta región donde se criaron algunos de los primeros ejemplares que sentaron las bases de la bravura moderna. Ganaderos como los Rivas o Francisco Delgado y Zuleta, y figuras como Curro “El Rubio” —un legendario mayoral—, contribuyeron a consolidar esta zona como cuna de una tradición tan arraigada como la tauromaquia. La nobleza, la fuerza y la autenticidad del toro bravo están grabadas en la historia de esta tierra.

Hoy, ese espíritu se respira aún entre nuestros muros y jardines. Cada evento que organizamos es un homenaje al carácter andaluz: genuino, elegante y con alma.

El Nombre de La Pava

El nombre de nuestra hacienda, La Pava, no es fruto del azar. Proviene de una antigua denominación geográfica: el Callejón de La Pava, que aparecía ya en notas del siglo XVIII. Esta vía recorría un entorno de naranjos, caminos de tierra y zonas hoy urbanizadas, atravesando lo que ahora es el parque del Quinto Centenario y conectando con el antiguo eucaliptal de la finca.

Pero hay algo más. La leyenda popular cuenta que durante años aparecía y desaparecía una Pava Real en los alrededores. Nadie sabía de dónde venía ni a quién pertenecía. Mi padre solía contarlo con asombro: algunos días estaba ahí, majestuosa, y al siguiente, simplemente no estaba. Años después, ese misterio quedó vinculado al alma del lugar, como si el espíritu de La Pava siempre estuviera presente, custodiando nuestra historia.